Pepe Vieira: después de dos estrellas por su cocina, dos llaves Michelin por un hotel «que va más allá del lujo»

Está siendo el año de Pepe Vieira. Después de recibir la segunda estrella Michelin por su restaurante de Camiño da Serpe y de reconvertir la centenaria ferretería Varela de Pontevedra en una churrasquería de tres plantas, el cocinero vuelve a Madrid para recoger dos llaves Michelin. Pero, ¿qué es exactamente este reconocimiento? Para el chef no es solo una placa más en su fachada y un empujón a un hotel que ya formaba parte de la exclusiva red Relais & Chateaux. Con estos premios, la Guía Michelin quiere destacar a los establecimientos que ofrecen experiencias excepcionales más allá de unas vacaciones. Es el primer año que se entregan y se basan en cinco criterios: que el hotel sea un destino en sí mismo, la excelencia de su arquitectura y sus diseños interiores, la calidad del servicio y el confort, la autenticidad y la capacidad para ofrecer una experiencia única. 

Algunos de esos puntos los recoge este Hotel de Naturaleza que Pepe Vieira abrió en Camiño da Serpe como complemento a su restaurante. En su inauguración, hace poco más de un año, reconocía que con su puesta en marcha cerraba un círculo de negocio que tenía en su cabeza cuando comenzó a construir este proyecto gastronómico que lo ha colocado en el podio de la cocina gallega. Este lunes respondía emocionado a la llamada de La Voz de Galicia desde Madrid, donde recibió el premio. «No esperaba que nos diesen las dos llaves, una cosa son los restaurantes y otra muy distinta los hoteles. Existen verdaderas joyas en España, pero la guía valora las experiencias que puedes llegar a tener más allá del lujo. Estamos encantados de estar entre los 17 mejores de España y de llevarnos este premio para mi pueblo, para Raxó y para Pontevedra», comentaba el cocinero. El Hotel de Naturaleza Pepe Vieira es el único de Galicia junto a Casa Beatnik, en Vedra, que recibe este premio.

El chef pontevedrés levantó 14 cabañas integradas en la naturaleza en la falda de la montaña con vistas a la ría de Pontevedra, son una especie de balcón sobre el mar que se mimetizan con el entorno. La idea no es solo vender el lujo, sino que la oferta va ligada a una experiencia gastronómica que incluye un desayuno con tres pases: una parte salada, otra de frutas y una dulce y la posibilidad de hacer algunos de los planes que llevan a los huéspedes a vivir otras vidas. Los huéspedes pueden escoger entre una salida a una bodega de la zona acompañada de la sumiller del restaurante o incluso ir hasta las isla de Ons en un viaje individual. 

Este verano que quedó atrás fue el primero del hotel y el resultado ha sido inmejorable, especialmente en agosto. Buena parte de esa culpa la ha tenido entrar a formar parte de la red Relais & Chateaux, que le sirvió como palanca para llegar a un mercado todavía desconocido para Pepe Vieira. Y es que el hotel va ligado al restaurante y eso abrió las puertas de Camiño da Serpe a mucho cliente norteamericano, que tiene en esta prestigiosa revista un referente gastronómico y de hospedaje. 

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